miércoles, 31 de julio de 2013

la crueldad de los físicos

mi lista de supervillanos reales, es decir no imaginarios, estaba compuesta por los típicos políticos, líderes religiosos, mafiosos ilegales, mafiosos legales, casas reales y demás gente que hace que el mundo sea peor. hoy voy a incluir a los físicos teóricos como uno de los grupos más retorcidos, porque no hacen este mundo peor de forma activa. lo hacen de una forma sutil, lo hacen por comparación. porque han desarrollado la teoría de los multiversos, en el que hay infinitos universos paralelos en los que todo es posible. existe pues un universo en el que soy inmortal, otro en el que la mujer de mis sueños me ama y está conmigo, incluso alguno en el que tengo algo de dinero. pero no, vivo en éste. y los malditos físicos se empeñan en que hay otros y a mí sólo me queda lamentar la suerte que tengo e imaginar cómo sería vivir en esos otros. pues no, me niego. señores físicos: están equivocados. si hubiera una cantidad infinita de universos y todas las opciones fueran posibles, habría uno en el que no habría otros universos, y por lo tanto y como yo vivo en uno, tiene que ser ese a la fuerza. así pues, no me queda otro que alegrarme de vivir en uno en el que, al  menos, soy feliz.

lunes, 29 de julio de 2013

La fotografía

en el pasado, una fotografía era un acto importante, en el que un hecho que iba a suceder en el futuro se marcaba en la agenda para que alguien lo inmortalizara. porque apretar el botón no sólo era complicado, sino que además costaba dinero. y existía una raza especial, que quizá hacía fotos espontáneas, que sabía esperar el momento y que tenía el ojo entrenado para saber mirar, para captar el momento. y entonces, los momentos de esos presentes que se habían captado en el pasado, pasaban por el proceso del revelado, del proceso de ir a buscarlos, y poder mostrarlos en diferentes futuros, en los que ver una fotografía sería un acontecimiento. ahora tengo la impresión de que me convierten el presente en imágenes fijas del pasado, y que el futuro no será nunca el momento para ver instantes anodinos que jamás tuvieron la importancia suficente como para ser grabados, pero que hubiera sido imprescindible que hubieran sido vividos sin la interrupción de tener que posar y forzar la sonrisa.