jueves, 31 de julio de 2014

tirando la toalla

creí que había tirado la toalla. me había dicho a mí mismo que el esfuerzo sólo me hacía daño. que iba a mirar hacia otro lado. sin embargo yo digo una cosa y el que va al volante piensa otra cosa, porque llego de viaje y desempaquetando la maleta, pongo mi autorregalo en la encimera de la cocina para limpiarlo antes de guardarlo. y cuando abro el grifo y cojo el estropajo, me doy cuenta de que he comprado dos boles. bonitos, de barro esmaltado, pero dos. sin sentido, pero mi inconsciente no se rinde y piensa en el futuro.

lunes, 14 de julio de 2014

la sombra en el balcón

... y le dijo: cuando vuelva, nadie puede verme. lo que voy a hacer es tan vergonzoso que no podría regresar de otra forma. todos creerán que he muerto y será mejor así. sólo la idea de estar entre tus brazos impedirá que ese aciago destino se cumpla, pero no podrá ser si alguien aabe que estoy vivo y pueda venir a buscarme y a pedirte explicaciones. la segunda condición es que no me preguntes qué he hecho. sólo tienes que saber que ha sido monstruoso pero que forma parte de algo más grande que yo. que jamás lo hubiera hecho por mi voluntad. con estas dos condiciones vendré a refugiarme tras los muros de tu castillo, y a confortarme bajo la protección de tu sábana y el calor de tu pecho.

y su amor le impidió negarse. ahora podéis entender la sombra que recorre las almenas lanzando piedras a todo el que se acerca. respetad el destino de los amantes y no queráis mirar por la ventan que se ilumina a media noche. hay monstruos que es mejor dejar dormir.